Plan “anticrisis” y fondos de pensiones de los trabajadores



México, Distrito Federal Jueves 08 de enero de 2009
* Los trabajadores empeñarán su pensión a cambio de un préstamo a corto plazo otorgado por ellos mismos a cargo de su propia cuenta El plan “anticrisis” del gobierno espurio, presentado el día de ayer, significa un golpe más a la futura pensión de los trabajadores, afirmaron las secretarias del Trabajo y de Salud, Bertha Elena Luján y Asa Cristina Laurell. Afirmaron que la tercera medida contenida en este plan para proteger a los trabajadores consiste en enviar al Congreso de la Unión una iniciativa para que más trabajadores desempleados puedan sacar dinero de sus cuentas individuales de retiro y en un monto mayor. Es decir, explicaron, pretende cambiar el artículo 191 de la Ley del Seguro Social que regula los retiros extraordinarios de la cuenta de retiro en caso de desempleo. Señalaron que dicha propuesta puede parecer buena para los trabajadores que pierdan su empleo, pero equivale a que empeñen su pensión a cambio de un préstamo a corto plazo otorgado por ellos mismos a cargo de su propia cuenta. Es otra faceta de la política neoliberal que recarga sobre los individuos todo el peso de los desajustes causados por el modelo económico, puntualizaron. Subrayaron que la medida agrava todavía más la crisis del sistema de pensiones y en consecuencia, las futuras pensiones. El primer golpe al sistema de pensiones ha sido la pérdida, eufemísticamente llamada minusvalía, de entre 15 y 25% del valor de los fondos depositadas en las Afore a causa de la crisis financiera global; pérdidas que difícilmente se revertirán. Eso es, el trabajador tiene menos ahorros que hace un año y como su futura pensión es proporcional a sus ahorros, ésta bajará, mencionaron. Resaltaron que el segundo golpe al sistema de pensiones es precisamente la pérdida de los empleos, porque los desempleados interrumpen la cotización a su fondo de pensión. Esto, a su vez, tiene dos repercusiones sobre su pensión. Por un lado, pierde semanas de cotización lo que le obligará a laborar más años, si puede y consigue trabajo, para cumplir las semanas de cotización—1,250— para tener derecho a jubilarse. Cada semana de desempleo que transcurre le aleja de esta posibilidad, expusieron. El otro lado del problema –agregaron— es que aunque el trabajador no cotiza a su fondo, la Afore sigue cobrando por administración un porcentaje –en promedio 1.94%– sobre sus ahorros (saldo de la cuenta), incluso hubo un cambio reciente votado por el PRI y el PAN en la Ley de las SAR que eliminó, justo a tiempo, el cobro sobre los depósitos y la cargó al saldo. El inducir el retiro de un mayor monto de las cuentas del trabajador a causa del desempleo se suma entonces a las otras pérdidas de su fondo. En esta perspectiva la futura pensión se va alejando en el tiempo y su monto va bajando día con día, consideraron. Cuando el fondo no alcanza para la pensión garantizada de un salario mínimo, el Estado tiene que poner el dinero faltante, lo que significa un gasto fiscal creciente en el futuro. O sea, que los contribuyentes pagaremos lo que las Afores perdieron, adelantaron. • • • • •