Pide López Obrador a Obama no impedir el flujo de trabajadores migratorios mexicanos hacia Estados Unidos



Tubutama, Sonora Sábado 10 de enero de 2009
* Sería un error aplicar cualquier medida o política que frene el tránsito de connacionales al vecino país del norte, alerta * Sostiene que la relación bilateral debe sustentarse en la cooperación y no en el uso de medidas coercitivas * El fenómeno migratorio no se resuelve con la construcción de muros ni con la militarización de la frontera común, afirma A unas cuantas horas de que se lleve a cabo la reunión entre el presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, y el presidente espurio Felipe Calderón, Andrés Manuel López Obrador pidió al próximo mandatario estadunidense mantener una relación bilateral que se sustente en el principio de cooperación y “no en el uso de medidas coercitivas”. Desde el norte del país, el presidente legítimo de México, dio a conocer el contenido de una carta dirigida a Obama. El propósito principal de la misiva es “expresarle que sería un grave error poner en marcha, por parte de su futuro gobierno, una política que impida el flujo migratorio de mexicanos hacia Estados Unidos”, explicó. Afirmó en el escrito que la solución al problema migratorio no se encuentra en la construcción de muros ni en la militarización de la frontera, sino en el desarrolló económico y social en México. En la carta, de dos cuartillas, López Obrador expresó que espera que el presidente número 44 de los Estados Unidos de Norteamérica ponga en práctica un plan para solucionar la situación migratoria de los mexicanos que viven y trabajan en el vecino país del norte. “Estoy seguro que tendrá la virtud y la suerte para responder a las grandes expectativas que ha despertado entre su pueblo y el nuestro”, precisó al informar que emigran hacia territorio norteamericano un promedio de 500 mil connacionales cada año, en busca de oportunidades que mitiguen su hambre y su pobreza, debido a que en México se impuso, desde hace 26 años, una política de pillaje, llamada neoliberal, que canceló cualquier posibilidad de crecimiento económico y la generación de fuentes de empleo. De esta forma y “como usted comprenderá --expuso a Obama—después de un largo periodo sin crecimiento económico, si no fuese por el fenómeno migratorio, ya hubiese habido un estallido social en México. Antes, al inicio del documento, el presidente legítimo de los mexicanos informó a Barack Obama que Calderón se ostenta como presidente de México. Detalló: “Este ciudadano –Felipe Calderón—ocupa dicho cargo como resultado de un gran fraude electoral, orquestado por un grupo mafioso de traficantes de influencias y políticos corruptos”. Y agregó en la misiva: “En nuestro país existe una República aparente, simulada, falsa; hay Poderes Constitucionales, pero en los hechos un grupo ha confiscado todos los Poderes. Esta especie de dictadura encubierta no sólo ha nulificado la vida democrática, sino que ha causado una infame desigualdad económica y social”. Sin embargo, aclaró que los mexicanos “ya estamos enfrentando de manera soberana esta penosa circunstancia”. En el tercer día de gira por 21 municipios de Sonora y Baja California, el presidente legítimo de México llamó al pueblo de Sonora a “no votar por los verdugos”, que son el PRI y el PAN, quienes sólo se acuerdan del pueblo cuando necesitan de su voto y después lo dejan en el abandono y la pobreza. Por ello, expresó: “ni un voto al PRI, ni un voto al PAN” y recordó que los gobiernos priistas y panistas sólo se han dedicado a entregar el patrimonio de los mexicanos a empresas particulares, como ocurrió con los ferrocarriles y los bancos.